La exposición tiene como objetivo comprender la diversidad cultural como la universalidad del hombre a través de la comparación de dos culturas amazónicas (Karayá y Kayapó) con la cultura de los montevideanos. A través de fotos y objetos de ambas culturas se genera un contrapunto que permite apreciar tanto las distancias como las cercanías entre las dos culturas y advertir el aspecto universal del hombre.
El material etnográfico de los Karayá fue colectado por Gustavo Demicheri y el de los Kayapó por Alejandro Pesce quienes en la década de 1950 estuvieron en contacto con estas comunidades indígenas.
A través de fotos y objetos de los amazónicos como de los montevideanos se genera un contrapunto que permite apreciar tanto las distancias como las cercanías entre las culturas y advertir el aspecto universal del hombre.
La exposición comienza con el planteo de las ciencias sociales y finaliza de la mano del artista plástico Ariel Severino quién con su pintura digital cierra el discurso con seis obras de las cuales las dos última fueron concebidas especialmente para integrar esta exposición.