En el Museo de las Migraciones de la Intendencia se inauguró la muestra Miradas de Iberoamérica
“Náufragos de la globalización”, llama Eduardo Galeano, a los millones que se desplazan por el planeta en un texto sobre los migrantes que se leyó en el acto del Museo de las Migraciones, realizado en un amplio espacio abierto, frente a los restos arqueológicos de la muralla de Montevideo antiguo. Allí el MEC, a través del programa Iber-Rutas, inauguró la muestra fotográfica que reúne las imágenes ganadoras del Concurso Miradas de Iberoamérica, 3ra. edición: “Migrantes, memoria y cultura”.
Muestra Miradas de Iberoamérica, 3ra. edición: “Migrantes, memoria y cultura”.
“Desde siempre, las mariposas y las golondrinas y los flamencos vuelan huyendo del frío, año tras año, y nadan las ballenas en busca de otra mar y los salmones y las truchas en busca de su río. Ellos viajan miles de leguas, por los libres caminos del aire y del agua. No son libres, en cambio, los caminos del éxodo humano (…)”.
“Viajan desde el sur hacia el norte y desde el sol naciente hacia el poniente. Les han robado su lugar en el mundo. Han sido despojados de sus trabajos y sus tierras. Muchos huyen de las guerras, pero muchos más huyen de los salarios exterminados y de los suelos arrasados”, dice el texto de Galeano.
Con la identidad en la mochila
El Día Internacional de las Migraciones inauguró la tercera edición de esta muestra con la participación de la subsecretaria del MEC, Edith Moraes, el intendente Daniel Martínez, la directora del MUMI, Irene Cabrera, la representante de la Organización Internacional de las Migraciones (OIM) en Uruguay, Alba Goycoechea y Julian Ekwuniffe, inmigrante nigeriano, de la ONG Idas y Vueltas. 
Mesa de autoridades con representantes del MEC, IM, OIM e inmigrante nigeriano.
“Después del acto fotográfico de quién está detrás de la cámara, llega el gran acto de construcción de sentido, que aporta el espectador”, dice Gustavo Rivero, del colectivo Pelota de Japón, en uno de los cuadros de la muestra y a construir el sentido ayudan las miradas fotográficas expuestas (heterogéneas, cargadísimas algunas, muy vivenciales), como la serie “Fronteras”, del chileno Raúl Charlín, sobre once mujeres peruanas asesoras de hogar en Chile o “Rihanna”, las imágenes de una peluquería dominicana en Buenos Aires o la serie “Hoy y todos los días 28 de julio” del español Antonio Perez Gil sobre peruanos viviendo en Tokio.
Por su parte Cabrera recuerda a los presentes que el lugar donde estamos sentados era el foso de la ciudad amurallada, mientras cuenta que el Museo está cumpliendo cuatro años, que ha duplicado el número de visitantes y cuadruplicado las visitas de las instituciones educativas. Además se trabaja para terminar la recuperación del tramo de muralla semienterrado, visible detrás de sólidos soportes estructurales de hierro y enfatiza que el papel de la institución es “darle voz a quienes están cerca”, mientras pide a los colectivos de migrantes en Uruguay que se acerquen a la institución.
A su turno Julian, el nigeriano que llegó a Uruguay hace tres años con su familia, estudiante de Ciencias Políticas, logra conmover a todos con pocas pero sentidas frases de agradecimiento a autoridades y ciudadanos, manifestando que Uruguay es uno de los países que más favorecen a los migrantes en el mundo. “Soy un viajero, un día seré un ciudadano”, sostuvo.
Inauguración oficial de la muestra en el MUMI.
La subsecretaria del MEC cuenta que el Ministerio asumió con “muchísimo entusiasmo” el programa Iber-Rutas, dentro del cual se inaugura esta muestra. “El que anda por los caminos lleva en una mochila su identidad y su cultura”, dijo y nuestro papel es propiciar encuentros con ese viajero para “rescatar los valores que nos hacen más humanos, proporcionando el espacio para que el ser humano crezca como persona”.
Goicoechea leyó un mensaje del secretario general de la OIM, William Lacy Swing, que hizo mención a los “días sombríos que hemos vivido, los actos de violencia, el pequeño cadáver simbólico del niño sirio en la playa del Mediterráneo”, pero también a los “festivales de luz celebrados en India y África en estos días” y a la tradición de los irlandeses, que colocan una vela en la ventana en tiempos navideños.
Uno de cada siete habitantes del mundo es migrante, son mil millones de personas que a pesar de “la hostilidad sin precedentes y el temor que genera en muchos lugares”, el diplomático confía en que “las comunidades abrirán sus brazos y sus corazones” a los migrantes.
Martínez al cerrar la ceremonia recordó una anécdota personal en una reunión de ciudades iberoamericanas en Europa, en plena conmoción del pequeño cadáver sirio en las playas mediterráneas, se emocionó y no pudo evitar quebrarse en medio de su breve discurso. Se hizo un minuto de silencio por los muertos en el mediterráneo, uno de cada cinco son niños.
El encuentro finalizó con el coro del Banco de Seguros “A todo riesgo”, quienes demostraron su apego a la camiseta cantando villancicos navideños.
JV/RL